Sí soy culpable. Yo estuve cuidando a un hombre que Mario secuestró. Yo le hacía la comida y le limpiaba el cuarto, eso ya no está a discusión. Soy culpable y me jodí la vida, o por lo menos una buena cantidad de años, ni modo. Pero cuando entré al reclusorio, estaba embarazada y mi niño nació aquí. Me dijeron que lo iba a poder criar yo, que estaría en la escuela y eso. Pero la verdad es que todo es una mentira, bueno, más bien no te explican que tu hijo irá a la escuela si ellos quieren, que no va a caber en la misma celda donde duermes, que a veces tendrá que dormir en el piso y que vas a tener que dar dinero para que tenga mejores condiciones. Nadie te dice que es mejor que alguien de la familia se lo lleve y tampoco te dicen que vas a sentirte tan triste y desconsolada cuando él se tenga que ir.